La tristeza profunda

La tristeza profunda es la situación más cercana a la verdad

La alegrÍa puede ser pasajera, ilusoria, un subidón anímico provocado por las inocentes endorfinas.

La alegría puede ser actuada por profesionales de la actuación o tiktokers, por políticos o empresarios vendiendo volutas de humo transitorio.

La tristeza profunda es el camino a la poesía, de sacar el sentir desde muy dentro, donde no llegaba nadie, ni el respiro del viento.

La tristeza es la neta

Es la verdad absoluta de que llegaste al fondo de la verdad

de que notas lo frágiles que son las ilusiones y planes

La tristeza profunda no es depresión, no es enfermedad, no es ningún mal anímico que puedan resolver dos pastillas.

La tristeza profunda es ese estado de realidad,

de notar ¡cuán pequeños somos!

de ver manos que nos conducen en decisiones que tomamos nosotros

de ver decisiones que tomamos sin saber siquiera a donde nos conducen

La tristeza profunda es un estado límbico, 

entre quien soy quien debo ser y quien sé que he alcanzado a ser.

ese estado en el que no me miento

no me hago pato, no es necesario sonreírle al espejo

Esta tristeza debe ser como el amor:

aquello que filósofos y poetas han tratado de ponerle cuerpo

olor y sabor y no hemos superado lo subjetivo.

¿Cómo definir cualquier cosa y no quedar en el intento?

Este respirar es como una onda hertziana que sube y baja

y choca con las montañas y fluye al ritmo del oleaje.

Es un par de contrarios que tintinean a lo largo del día.

La tristeza profunda es ver ese resbalar de la arena en ese frasco del tiempo

un interminable camino de constante espera

de anhelada huella.

La tristeza es eso nomás

estar dentro de ti

nadie al lado o alrededor o enfrente o detrás

nadie

La tristeza soy yo en persona.

Gracias a ti, triste, que me das vida.

MMM diciembre 2022